Ars Amandi se encuentra en la actualidad preparando lo que será su quinto disco de estudio. De momento, no pudimos catar el sabor de ninguno de esos temas, pero sí dar buena cuenta de lo más granado de su discografía hasta la fecha.
Ya desde el día anterior corría un fuerte rumor de situaba a Sherpa subido en el escenario tocando cinco temas con sus ex compañeros, incluso se sabía cuáles serían. La cosa quedó en agua de borrajas.
Poco a poco nos olvidamos del calor a la par que Ars Amandi nos empapa con sus canciones, la primera de ellas “La Voz Que Me Guía”. La segunda se me pasó, por lo que no puedo dar cuenta de ella (aunque creo que fue “Ven Hacia Mí”). Sí de la tercera, “Gritando Al Mar”, otra de las composiciones más insignes y asequibles de la banda. Otra de las piezas que va ganando enteros en su directo es “Desterrado De Tu Cuerpo”, que con su aire ochentero a lo Sangre Azul tan buena acogida ha tenido entre el público.
A medida que van desgranando sus canciones, nos damos cuenta de que ganan mucho en vivo. “El Viajero” es una prueba más de ello, como también lo es “No Queda Sino Batirnos”, el tema que Txus de Mago De Oz compuso para Ars Amandi. Con el público entregado, suena “Tu Ley” y “Abre La Puerta Niña ”, clásico de Triana que los madrileños adoptaron desde sus inicios y que se ha convertido en una canción habitual en sus directos, como también lo es el radiado “Escuchando Al Corazón”. El colofón lo ponía “La Suerte Está Echada”. Pues bien, si nos fijamos en el set, contemplamos que con tan sólo cuatro discos ya tienen un repertorio plagado de temas imprescindibles. No tocaron “Camino Sin Fin”, una pena, pero fue un gran espectáculo de todos modos. Esperemos que su nueva obra tenga más piezas esenciales que añadir a sus directos.
Ya desde el día anterior corría un fuerte rumor de situaba a Sherpa subido en el escenario tocando cinco temas con sus ex compañeros, incluso se sabía cuáles serían. La cosa quedó en agua de borrajas.
A los que sí pudimos ver fueron a los Barón Rojo actuales, formación que comprende, aparte de los hermanos De Castro, al bajista Gorka Alegre (Ñu, Adler´s Appetite, Spei) y al batería Rafa Díaz (Sabatan, Asgard, Easy Rider, Neomenia, Knell Odyssey). Como se pudo comprobar, esta alineación del grupo va muy en serio.
Jugaron al despiste con el primer tema, extraído de su discografía profunda, tanto que no pude precisar de qué tema se trataba. Ya nada más comenzar comprobamos cómo no quieren vivir del pasado, dejando claro que siempre hubo vida después de Sherpa. Y para muestra un botón: “Fronteras” era la segunda pieza a interpretar. “Larga Vida Al Rock N´Roll” era el primer corte de los Barón Rojo más clásicos, mientras que “Cueste Lo Que Cueste” les devolvía a la era post-Sherpa, una etapa de la que se sienten bien orgullosos. Son ahora los primeros acordes de “Breakthoven” los que nos devuelven a la gloria de los ochenta, de la cual ya no se distanciarían en todo el concierto. Todo un cañonazo y un detalle que se acuerden de este tema para un set tan corto. Aunque si de algo no se pueden tildar a los shows de Barón Rojo es de repetitivos. Si “Breakthoven” fue todo un cañonazo, “Hermano Del Rock And Roll” era otra dosis de un júbilo que estallaba sin más con “Concierto Para Ellos”.
Los guiños a bandas clásicas de rock siempre han sido una constante en las actuaciones de Barón Rojo y un amago del “Another One Bite The Dust” (Queen) sirve para dar salida de inmediato a “Cuerdas De Acero”, su oda personal a las seis cuerdas que se traduce en todo un clásico del Heavy Metal patrio. Lo mismo se puede decir de la que le sucedía, la canción que marcó una época en 1982, su mega-hit por excelencia: “Los Roqueros Van Al Infierno”, siempre efectiva, y que no estuvo exenta en su parte media de esos retazos de “Smoke On The Water” (Deep Purple) y “You´ve Got Another Thing Coming” (Judas Priest), para retornar con decisión a esa declaración de principios que entona con orgullo el canto elegido por millones de rockeros en el mundo. Su rollo y el nuestro, es el rock, y con él hasta el fin. “Resistiré”, reza el título del tema que cierra una actuación memorable. Con una base rítmica acojonante, más heavy que el trueno. Nunca he escuchado a Barón Rojo interpretar con tanta fuerza este tema, que resume fidedignamente lo que fue su actuación en el Festival Del Oeste. ¡Qué grandes! Con conciertos así seguirán alimentando su leyenda.
Era el momento de Metalium. Ganas tenía de verlos en su nuevo rol de quinteto, mas mi sorpresa fue cuando el larguirucho guitarrista Mathias Lange brillaba por su ausencia. El pobre de Tolo Grimalt tuvo que merendarse todas las partes de guitarra. Por lo demás, la hercúlea voz de Henning Basse siempre será un reclamo para los que amamos el verdadero metal, así como la actitud escénica de un conjunto que rompe lanzas por el Heavy Metal.
Tal y como comenzaba aquel “Chapter 1” arrancaba la actuación de los germanos Metalium. Eso sí, omitiendo la introducción narrada por Mike Terrana. “Fight” y “Break The Spell” eran las primeras piezas que llegaban a nuestros oídos de una banda muy diferente a la de ahora, de la que sólo Lars Ratz y el descomunal vocalista Henning Basse se mantenían, debido a la ausencia del guitarrista Mathias Lange (no se porqué no estuvo ahí).
El Segundo capítulo quedó olvidado por completo, no así el tercero representados por “Rasputin” y “Odin´s Spell”. Después de los cuales aprovechan para anunciar que en septiembre u octubre tendrán nuevo disco y ya nos dan muestras de por dónde van a ir los tiros. “Heavy Metal” es el nombre del primer tema que interpretan del venidero disco. Regresan a la senda de temas conocidos con “Heros”, antes de volver a recordarnos que en otoño tendrán un nuevo álbum. Pero ahora el que no recuerda el tema del futuro disco que interpretan soy yo.
La andanada de canciones prosigue con “Cyber Horizon”, metal, puro metal como “Metalium”, o el temazo “Free Forever”. Mucha representación de su primera entrega, sí. No obstante terminaron con el bonus track de ese álbum: la powermetalera version del “Smoke On The Water”. Yo, personalmente, hubiera elegido otro cover que la banda alemana ha registrado, “Show Must Go On” de Queen.
Resumiendo, ningunearon el segundo, cuarto y séptimo disco, álbunes plagados de verdaderas alhajas metálicas. También reseño que no es el mejor concierto que les he visto hacer. Quizá me empecine a que se deba a la ausencia de Mathias Lange o que el repertorio no me pareció el adecuado, pero es así como lo siento.
Al día siguiente tocaban en el festival salmantino Jamón Rock, donde ejercían de cabezas de cártel. Seguro que la historia allí fue diferente.
Rata Blanca era otra de las bandas que no pudo tocar el año pasado en el Recinto Hípico cacereño debido a las inclemencias meteorológicas. Esta vez, a la 1h. 20m. y con una temperatura agradable, salieron a escena para dar un buen repaso a lo que es su nuevo y vibrante álbum, que está al caer en tierras españolas en su formato físico. También habrá una versión en inglés cantada por Doogie White.
“Las Voces Del Mar” nos hacen presagiar que el primer tema de la velada sería “El Reino Olvidado”. Así fue. “La Otra Cara De La Moneda ” era el único recuerdo de su pasado más reciente, para seguir memorando su legado más clásico con “Sólo Para Amarte”.
“El Círculo De Fuego” daba paso a una sucesión de temas nuevos. “Diario De Una Sombra” y “71-06 (Endorfina)” suenan fenomenales con la guitarra de Giardino sonando con impecable precisión. Pero el escalonado tramo de clásicos estaba por llegar. “Guerrero Del Arco Iris” el primero de ellos, que Adrián presentaba como un tema que conocíamos todos. Y qué decir de la siempre emocionante y espléndida “Mujer Amante”. Como viene siendo habitual en las veladas de Rata Blanca, el punto final lo pondría su clásico por excelencia, una de las canciones imprescindibles de su discografía, el tema que no necesita presentación pero que muchos necesitamos en nuestras vidas, “La Leyenda Del Hada Y El Mago”. Chapeau.
Walter, toda elegancia y saber estar, Barilari un frontman de garantías que borda su papel, las teclas de Bistolfi y una base rítmica formada por Fernando Scarcella y Guillermo Sánchez hacen de Rata Blanca un plantel de lujo.
Decir que han hecho un gran concierto viene siendo una redundancia, decir lo contrario hubiera sido noticia, y aquí no hay novedad. Y me reitero, Rata Blanca siempre ha sido todo un garante arriba del escenario.
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