Después de tres años de silencio desde su anterior lanzamiento “Keepers Of The Light” vuelven a la carga los americanos de Bloomfield, New York, BATTLECRY, con este su tercer disco “Today Belong To Us”, obra de los señores David Johan (voz y bajo) y Richard Stewart (guitarra y batería).
Echándole un vistazo a la portada lo primero que llama nuestra atención son los tres jinetes alados (que no serán los del Apocalipsis a no ser que el cuarto se haya caído de su caballo) blandiendo sus espadas contra la clase política americana con el ex-vicepresidente George W. Bush en primer plano (lo que recuerda a la portada del single “Sanctuary” de IRON MAIDEN y la polémica con Margaret Thatcher).
De las letras no vamos a hablar ya que tras la portada os la podéis imaginar, cargadas de alto contenido político.
En lo referente al aspecto musical contamos con 12 temas:
01. “Blood And Honour” abre el disco con un juego de canales izquierdo y derecho y dando a conocer lo que será la tónica del mismo.
02. “Break The Spell”, más dinámico y rápido que el anterior.
03. “Hollow Man”, el más melódico del disco.
04. “New World Order”, este tema es el que se sale un poco de la pauta en cuanto al tratamiento de las voces en la forma de cantar e introduciendo algunos efectos tipo megáfono.
05. “Don´t Cry For The Angels”, medio tiempo con alternancia de partes acompañadas por una guitarra acústica.
06. “Skull Splitter”, quizás el tema más rápido del disco.
07. “Mo Chroi”, tema instrumental en el que ambos compositores hacen gala de su habilidades.
08. “Vienna”, aunque empieza con intro de piano, se torna en un tema de bella factura con gran presencia de bajo.
09. “Desperate Hours”, un tema compacto desde el comienzo y al igual que en el anterior destaca la presencia de bajo.
10. “Thunder From Down Under”, comienza con una grabación y a partir de aquí empieza la parte más floja del disco.
11. “Soldiers Of Steel”, es el que tiene más tintes hard rockeros a pesar de su contundente base rítmica.
12. “Today Belong To Us”, tema que da nombre al disco, poco más que reseñar.
Aunque el disco es sobrio en voces, debido a la linealidad de las mismas, estas son eficaces en el estilo que practica este combo, las cuales se ven enriquecidas con los coros que acompañan en ciertas estrofas pese a que en parte sean una sola voz.
El punto fuerte del disco está en las guitarras de Richard Stewart, bien producidas con sonoridad contundente y limpia, a la par tanto en rítmica como en solistas. Se nota que el señor es guitarrista de antaño y sabe trastear en un estudio. No hace falta reseñar la labor de David Johan además de en las voces al bajo, ya que este tiene sobrada presencia, destacando los punteos de bajo a lo largo del álbum.
Buen disco, no es para tirar cohetes, pero sobresale por su buena ejecución.
Como tú bien dices no es para tirar cohetes, pero alguna bengalilla sí que se podría encender. Por otro lado, la portada mola. ¡A ver si atizan a esos cabrones destructores!
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