PRAYING MANTIS es una banda de la NWOBHM formada por los hermanos Troy, que en 1974 se empecinaron en
formar un conjunto musical. Fue en 1979 cuando editaron el EP “The Soundhouse Tapes” (aquí hay paralelismos
con IRON MAIDEN) y en plena eclosión
de la avalancha metálica británica publicaron “Time Tell No Lies” (1981). La banda se quedó estancada y no fue
hasta la década de los noventa cuando comenzó a editar discos de manera más
regular. A modo de anécdota, cabe reseñar que hubo un tiempo en que PRAYING MANTIS contó en sus filas con tres
ex-militantes de IRON MAIDEN (Paul Di´Anno, Dennis Stratton y Clive Burr).
Ahora, seis años después de “The Journey Goes On” regresan, pero esta vez con la ausencia de Dennis Stratton, quedando la banda como
sigue: Tino Troy (guitarra), Chris Troy (bajo), Andy Burguess (guitarra), Benjy
Reid (batería) y Mike Freeland
(voz). Es de resaltar la novedad de este último, quien atesora una fenomenal
voz que encaja al dedillo con el concepto de las composiciones.
Pese a ser una banda sempiternamente ligada a la
NWOBHM, no te confundas, no tienen ese sonido metálico de unos SAXON, IRON MAIDEN, DIAMOND HEAD
o JUDAS PRIEST, por citar algunos,
sino que su propuesta musical se ciñe a un metal hipermelódico muy del gusto de
Frontiers Records. Y Serafino (responsable del sello), que
tiene el oído fino para los sonidos más melódicos, no ha querido dejar pasar la
oportunidad de tener a PRAYING MANTIS
en su escudería. La producción es responsabilidad de Andy Reilly, personaje que ha trabajado con ASIA, THE CULT o BRUCE DICKINSON, entre otros.
Ponen las cartas sobre el tapete con “In Time”, una partitura que va en la
línea predominante del disco: hard rock con melodías a raudales. Pero también
hay momentos para el A.O.R. como el caso de la segunda “Restless Heart”. “Tears In
The Rain” es una balada también algo aorera
con unas fantásticas guitarras blueseras.
“So High” es otro gran tema, pero es
muy parecido al inicial “In Time”,
quizá demasiado. Es la pega. Sus melodías se entrecruzan con facilidad en tu mente
sobre todo en lo que respecta al estribillo.
Como single quisieron escoger “Lonely Way Home”. Se trata de una sensacional balada a tener en
cuenta. Suben los decibelios con “Touch
The Rainbow”, mas siempre con ese sonido rebosante de melodía. Es difícil
resaltar los temas porque todos rayan a gran nivel. Los siguientes “Threshold Of A Dream” o “Playing God”, prueban la valía de un
disco que no decae en ningún momento. Ambos se siguen mostrando supermelódicos
tanto en la faceta instrumental como en el plano vocal.
Retoman el hilo más aorero con “Highway”, un
tema que te puede recordar a los más accesibles DEF LEPPARD. El corte homónimo, “Sanctuary” pone la guinda con otra dosis de heavy-rock melódico de
categoría.
En resumen, lo que ofrecen a día de hoy estos
británicos es Hard & Heavy hipermelódico con ramalazos del mejor A.O.R. La
veteranía no exime del esfuerzo por la superación y PRAYING MANTIS son prueba de ello.
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