sábado, 13 de agosto de 2011

EL TURBIO MOMENTO DE JUDAS PRIEST.


JUDAS PRIEST salen al paso de los rumores que invitan a pensar que la banda atraviesa por problemas internos debido a contrariedades entre mánagers: 

“Recientemente circulan propaganda y sinsentidos en Internet, incluyendo la página de Rob (www.robhalford.com), a propósito de la banda y sus managers. (Actualmente, Rob no controla su web y está en absoluto desacuerdo con los comentarios vertidos en ella) ”.

“Nos negamos a dejarnos arrastrar por cualquier argumento público - que está por debajo de nosotros y será tratado legalmente.”

“La banda siempre ha tomado conjuntamente las decisiones importantes y ha estado con el mismo management durante más de 25 años. Todo el mundo lo conoce y lo respeta en el negocio de la música y tenemos fe y confianza en la forma en la que siempre nos han guiado”.

“Estamos totalmente centrados ahora en el ‘Epitaph’ tour y las reacciones (del público) de cada noche han sido asombrosas. Los conciertos han sido increíbles y estamos pasando el mejor momento de nuestras vidas. Nuestra intención ahora es viajar por el mundo una vez más y llevar el heavy metal de JUDAS PRIEST a los fans. ¡El estado de ánimo y el clima en la banda nunca ha sido mejor!”.

“Ya hemos completado la primera parte de nuestra gira mundial (Europa y Reino Unido) y, ahora, tras un breve descanso, vamos a Sudamérica y Estados Unidos. Ven, únete y mantén la fe”.

Rob, Glenn, Ian, Scott & Richie.

La banda se refiere a este comentario, firmado por el manager personal de Rob Halford, John Baxter:

Queridos visitantes de RobHalford.com

Metal God Entertainment, Metal God Records y todas las compañías y webs afiliadas comenzarán a eliminar los temas relacionados con JUDAS PRIEST en protesta por la falta de profesionalidad y ética de Glenn Tipton, Jayne Andrews (matona personal de Glenn y sabandija), Bill Curbishley (sabandija apático) y John McBride (contable sin licencia y sin registrar, sabandija) en los asuntos de negocio de Rob Halford de los últimos seis años.

Rob negará esto en público, así que tomaremos un asiento junto a K.K. Downing y veremos cómo Glenn y Jayne sacan adelante el espectáculo.

Estoy seguro que leeréis más detalles sobre este asunto en el futuro.

Saludos,

John Baxter.

Este manifiesto aparecía el 29 de julio y aún se puede encontrar alguna copia por ahí. Poco después, el propio Baxter se apresuraba a borrarlo como confirmaba en otro comunicado posterior emitido el 1 de agosto. En él, argumentaba haber eliminado ese comentario porque es una cuestión que ya está en manos de los tribunales y de la que más adelante se conocerán nuevos detalles.

Este “sinsentido” al que se refieren JUDAS PRIEST, no lo sería tanto si en su fulminante carta de adiós K.K. Downing no hubiera dejado caer esto: “Han habido algunos roces en mi relación laboral con elementos de JUDAS PRIEST, el management de la banda y yo”. Parece cada vez más obvio el motivo de la marcha de KK, aunque no dejen de ser conjeturas, como que también se hable de que algunas maniobras de Janye Andrews (mánager y pareja de Glenn Tipton) podrían haber crispado el clima de la banda. Un clima que según el propio grupo “nunca ha sido mejor” a como lo es ahora. Sí señor, un plácido momento. Por eso hay otro tipo rubio en la banda y el representante de Halford está que trina.

Queda una segunda parte de la gira, un último disco, y en teoría apariciones puntuales en festivales una vez concluya el tour, pero… ¿está asegurada la continuidad de Halford tras la conclusión de todos los compromisos adquiridos? Esa es la duda que a mí me asalta. Todo esto podría ser un “sinsentido”, pero que Downing haya tenido desavenencias con esos “elementos” del grupo parece evidente como se aprecia en su misiva de despedida. Casualmente, desde el seno de PRIEST no han desmentido estos desencuentros a los que apunta el ya ex-guitarrista. De haberlo hecho, quizás pudieran haberse topado con la réplica de KK y quién sabe si éste hubiera apuntado con nombres a los causantes de su marcha. Él prefirió dejarlo a tener que estar a disgusto en su banda y haber deteriorado una relación de años con… alguien. Esto sólo una impresión personal, como también lo es que de todas las veces que he visto en vivo a JUDAS PRIEST nunca los noté con tan poco feeling y tan poca complicidad entre los músicos como en esta última gira, algo que ya reflejé en mi crónica. Sea como fuere, aquí hay culebrón para rato y algo pasa, de lo contrario la figura de Kenneth Downing seguiría flanqueando el lado derecho del escenario con la banda de su vida.


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