ALBUM REVIEW: UDO - "STEELFACTORY". Crítica de Diego González.

 

Alrededor de dos años ha estado ocupado Udo Dirkschneider realizando un par de giras especiales en las que los temas de ACCEPT cubrían todo el repertorio. Todo ello bajo el nombre de DIRKSCHEIDER. Ahora se desmarca de esa última etapa en directo, en la que comunicó su intención de no volver a interpretar nunca más los viejos himnos de su antigua banda. Y lo hace volviendo con U.D.O., banda que ha liderado durante más de tres decenios, y con un nuevo álbum debajo del brazo. Con una agenda tan ocupada como la que tuvo, ¿de dónde habrá sacado tiempo para componer este disco? No es precisamente corto… Son trece temas que, en la edición digipak ascienden a quince (los cortes “The Devil Is An Angel” y “Pictures In My Dreams” son los que figuran en el listado ampliado).

Según reza la nota de prensa: “El título del álbum es un homenaje al apodo de Udo (German Metal Tank) y su actitud realista, así como a su poderosa presencia en el escenario”. Producido por el danés Jacob Hanson “Steelfactory” verá la luz el 31 de agosto AFM Records.

Este trabajo presenta la novedad a la batería de Sven Dirkschneider, hijo del jefe, que se estrena en un álbum junto a su progenitor y a los ya habituales Fitty Wienhold (bajista) y Andrey Smirnov (guitarrista). El ruso vuelve a que asumir todo el peso de las guitarras en la grabación, como ya hiciera en el álbum “Steelhammer” (2013).

Udo es un hombre que nunca sucumbió a las tendencias musicales, un hombre que se mantuvo fiel a sí mismo y a sus seguidores y que a sus 66 años continúa al pie del cañón. La vida de Udo es el metal y el metal nos da la vida. “Steelfactory” nos hará latir nuevamente de pasión con una colección de canciones de alto nivel metalero en su modo habitual. No deja hueco a sorpresas desde la inicial “Tongue Reaper”, que arranca con una especie de intro muy ACCEPT para dar rienda suelta a este veloz corte de apertura típico de la discográfica del vocalista germano. Tras la primera embestida de metal teutón damos paso a “Make The Move”, de aires similares a “Living For Tonite” (ACCEPT) y en la que Smirnov se toma la libertad para meter pequeños solos aquí y allá como si estuviera replicando las estrofas cantadas por Udo. Testado queda que el puesto de guitarrista en la banda no le viene grande.

Algo que últimamente no viene extrañando es su gusto por incorporar melodías orientales. En “Keeper Of My Soul” se vale de ellas. También es fácil encontrar en su extensa trayectoria canciones al estilo de la tremebunda “In The Heat Of The Night”, un medio tiempo en el que Udo canta pausado antes de poner más énfasis a su voz y en el que unas bonitas armonías de guitarra decoran esta sobresaliente pieza. Volvemos a los sonidos de Oriente con “Raise The Game” y el cantante casi hablando a ratos, al más puro estilo del que nos tiene acostumbrado. “Blood On Fire” podría estar sigilosamente inspirada en un tango, concretamente en “Hernando´s Hideaway” (del musical “The Pajama Game”, 1954), pues ni cortos ni perezosos incluyen un pasaje instrumental del mismo. Y este rollo es muy ACCEPT. Después, a seguir repartiendo cera con “Rising High”, que salvando las distancias bien podría recordar al clásico de ACCEPT “TV War” en su espectacular arranque. Trepidante tema que también perdurará como de los más recordados de este álbum. Sin embargo, para ello, son muchos los que ostentan credenciales. “Hungry And Angry” presenta unos coros llenos de garra, pero si de verdad hay un estribillo para corear cual himno es el de “One Heart One Soul”, que no han tardado en inmortalizar en un video-clip. Dirkschneider se empeña en continuar fabricando clásicos y demuestra estar habilitado para la labor, no cabe duda. Mucha mordiente en “A Bite Of Evil”, que dispara unas infecciosas guitarras, mientras que su letra invita a pensar que puede estar basada en una historia de Hombres-Lobo. Con “Eraser” se produce un nuevo ataque del doble bombo para fortalecer uno de los cortes más rápidos y feroces del álbum. Casi llegando al término, “Rose In The Desert” deja que el bajo lleve el peso, y ya como colofón al disco, una balada. Quién sabe si rescatar canciones como “Winter Dreams” o “Amamos La Vida” para sus últimos repertorios como DIRKSCHNEIDER le han inspirado para crear esta bonita pieza acústica llamada “The Way”. Y así terminamos disfrutando de otra dimensión de U.D.O., con un final más reposado. 
“Steelfactory” ocupa el puesto decimosexto dentro del catálogo de discos de estudio en solitario del señor Dirkschneider bajo el apelativo de U.D.O. Por suerte, no creo que quede como uno más. Cierto es que se trata de un álbum que no modifica la fórmula que ha hecho clásico el sonido de U.D.O., pero también lo es que deja patente que la banda retoma la andadura en un excelente momento de forma, cumpliendo los estándares que se ha marcado a lo largo de su ya longeva trayectoria.

Discográfica: AFM Records.

Listado de temas:

1. Tongue Reaper
2. Make The Move
3. Keeper Of My Soul
4. In The Heat Of The Night
5. Raise The Game
6. Blood On Fire
7. Rising High
8. Hungry And Angry
9. One Heart One Soul
10. A Bite Of Evil
11. Eraser
12. Rose In The Desert
13. The Way

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