domingo, 9 de noviembre de 2014

LIVE REVIEW: LIZZY BORDEN + SEXPLOSION, Sala Caracol, Madrid (06/11/14). Crónica de Diego González.




“30 Years Of American Metal”: atrayente eslogan para la nueva gira de LIZZY BORDEN, cuyo tramo europeo, casualmente, fijaba a Madrid como punto de partida. Por el motivo que sea, era la primera vez que la banda norteamericana se presentaba en la capital. Este hecho, unido al de la efeméride a la que hacíamos mención, podría vaticinar una más que aceptable asistencia. Además, el concierto estaba previsto inicialmente para We Rock, cambiándose posteriormente a un local de mayor capacidad como es Caracol. Todo parecía indicar que luciría un buen ambiente, pero la realidad es bien distinta: otra sala que no consigue completar ni medio aforo.


La banda de hard rock madrileña fue la encargada de abrir para LIZZY BORDEN en la capital. En la actualidad se encuentran a las puertas de editar su segundo trabajo, y aunque éste aún no estaba a disposición del público, no dudaron en presentar muchos de los temas que lo componen.

En base a esas intenciones no tardaron en abrir fuego con “Bitches House”, tema que será su nuevo single y que pronto estrenará un videoclip promocional de apoyo. “Get Down To Get Higher”, o algunas de las canciones más memorables de su primer trabajo como “She´s Ready To Lick” o “Don´t Tell Me Who I Am”, también se citan en esta orgía de hard rock ochentero americano “made in Spain”.

El cuarteto presenta sus credenciales con buen tino. Su vocalista, Guillermo Starless, cuya voz me recordaba a ratos tanto a la de Eric Martin (MR. BIG), como a la de Jeff Keith (TESLA), se desenvuelve perfectamente en las tareas vocales mientras ejerce de guitarrista, como también despunta con efectivos solos de guitarra. El resto de la banda le arropa a la perfección.

Como decía, su apuesta por el nuevo álbum fue escandalosamente firme. Así sonaban “Justified Aggression”, “Just Fight” y “Price Of Ectasy”, recibiendo una calurosa acogida. Su nuevo disco deja visos de tener un buen potencial dentro de ese estilo musical que defienden, tan poco habitual por estos lares, pero en el que ellos se mueven como pez en el agua. Sólo hay que escuchar el cañonazo de versión que se marcaron con el “You Could Be Mine” de GUNS N’ ROSES, una canción que ya venían tocando en vivo y que les quedó de lujo. Y para terminar, qué mejor que “Afire”, el tema que fue single de “Powerful As Its Name” y él más conocido que de su repertorio hasta la fecha, dejando claro quiénes son SEXPLOSION.

Si te mola el rollo sleazy, en particular, o el hard rock, en general, no dudes en acercarte a verlos si tienes la oportunidad. No te arrepentirás.

Setlist SEXPLOSION:

-Bitch House
-Get Down To Get Higher
-She´s Ready To Lick
-Don´t Tell Me Who I Am
-Justified Aggression
-Just Fight
-Price Of Ecstasy
-You Could Be Mine (GUNS N’ ROSES)
-Afire


Gregory Charles Harges, artísticamente conocido como Lizzy Borden, aparecía por primera vez en un escenario madrileño acompañado por el guitarrista Ira Black, el bajista de origen sueco Marten Andersson, y el batería Joey Scott Harges que, aparte de ser hermano del líder es, junto a él, el único superviviente de la formación original de LIZZY BORDEN. Treinta años después la banda sigue en la brecha.

Su repaso a una discografía que comprende seis discos de estudio comenzó con “Master Of Disguise”, evidenciando desde el principio que el atrezzo también juega un papel importante en las actuaciones del grupo. El vocalista presentaba una máscara de tres caras que mantuvo en las primeras canciones. Rápidamente suena “Notorious”, que Lizzy cantaría asiendo un bate de beisbol que le acompañaría en algún tema más. “Welcome to 30 years of american metal” es el grito que profiere antes de dar comienzo a “Roll Over And Play Dead”. Se agradece un tema como éste, que no es de los más habituales en sus repertorios, pero quizá se estaba echando de menos el apoyo de un segundo guitarrista. Sin embargo, la banda estaba dando la talla.

Se produce un nuevo cambio de atuendo en el cantante. Ensangrentado y ya sin la careta inicial afronta un correctísimo “Rod Of Iron”, cuyas notas iniciales son gloria bendita. Ahora juguetea con una calavera e insta al público cantar los coros finales del tema.

Me sorprendió bastante que el público estuviera un tanto frío en muchas fases, quizá con la cabeza puesta en pensar que había que estar pronto en casa al ser jueves, el caso es que cosas como “Eyes Of A Stranger” ayudaban bastante a caldear el ambiente. No así con el tema de los solos (todos ellos para que Lizzy cambiara sus ropajes), que parecía producir el efecto contrario. El primero de ellos, a cargo del bajista, terminaba con la interpretación de las notas del tema central de la serie de televisión sueca “Pippi Langstrumpf” (aquí, “Pippi Calzaslargas”), las cuales enlazarían con el comienzo de “Tomorrow Never Comes”, una de las que sonó más impresionantes, con Lizzy vistiendo ahora una oscura capa que tenía más agujeros que un queso emmental. A “Long Live Rock N’ Roll” quizá le sobró alargarla un pelín por esto de hacer corear al público el estribillo. Por lo demás, estuvo perfectamente ejecutada y no desentonaba en absoluto, más cuando fusionan su final con el inicio del siguiente tema, “Under Your Skin”.

La sangre pasaría a ser protagonista en “There Will Be Blood Tonight” cuando el cantante se puso a pringar, cuidadosamente, a gente de las primeras filas, al tiempo que un ayudante enmascarado le procuraba un vaso lleno de ese rojo líquido. Después del momento más sangriento de la noche, llegaba el solo de guitarra de Ira Black, y tras una pequeña entrada de batería, “Me Against The World” formaría la algarabía. Se nota que es uno de los temas que mejor funcionan en directo. Ahora Borden aprovecha el solo de la canción para cambiarse y enfatizar su nivel de frikismo, sólo superado por la espantosa estampa que luciría en el siguiente corte, “American Metal”. Sin comentarios. Y cuando no llevamos ni una hora de actuación ya no está dando las buenas noches. Ahí fue cuando la gente empezó a percatarse de que esto no era como lo pintaban.

Un descansillo y regresan a las tablas, primero con un solo de batería, al que le sigue la imprescindible “Red Rum” y un definitivo “Born To Be Wild” que casi han hecho suyo, pues les acompaña desde los ochenta e incluso hicieron videoclip en su día. Lizzy Borden presenta a la banda y hasta otra ocasión.

Creo que para tratarse de la gira de la que se trata deberían haber sido más generosos en todos los aspectos, desde el visual hasta el musical, ya que en otras ocasiones lo habían sido mucho más sin nada que celebrar. Cosas como que no sacara el hacha a paseo, que dejara fuera canciones como “Give ‘Em The Axe”, o que tocaran dos versiones en un corto set de poco más de 70 minutos, provocaron la decepción de muchos de los asistentes. Una lástima que esto sea “30 años de metal americano”. Dicho esto, puede parecer que su actuación fuera un desastre, pero no. Lo que hicieron lo hicieron bien, muy bien diría, pero nos dejaron con ganas de más, de mucho más. Algunos temas más y hubiera sido un triunfo.

Setlist LIZZY BORDEN:

-Master Of Disguise
-Notorious
-Roll Over And Play Dead
-Rod Of Iron
-Eyes Of A Stranger
-Bass Solo
-Tomorrow Never Comes
-Long Live Rock And Roll (RAINBOW)
-Under Your Skin
-There Will Be Blood Tonight
-Guitar Solo
-Me Against The World
-American Metal
---------------------
-Drum Solo
-Red Rum
-Born To Be Wild (STEPPENWOLF)

1 comentario:

  1. En zaragoza sacaron el hacha a relucir y tocaron ese Give em the axe como guinda final.... saludos!

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