jueves, 16 de febrero de 2012

VAN HALEN: "A DIFFERENT KIND OF TRUTH" (2012). Review de Diego González.



Uno de los discos más esperados de los últimos tiempos en la comunidad rockera es “A Different Kind Of Truth”, de VAN HALEN. No sólo es un álbum más de la mítica banda, sino que además marca el retorno de David Lee Roth como cantante, siendo el primero con él al frente desde 1984, y el primero del grupo desde aquel desafortunado álbum de 1998 (“Van Halen III”) con Gary Cherone como vocalista. Además, es el primero sin la presencia del bajista Mark Anthony, cuyo puesto ocupa ahora Wolfgang Van Halen, que a sus 20 años comparte escenario con Eddie Van Halen (guitarra) y Alex Van Halen (batería), padre y tío, respectivamente.

Otra de las novedades es la ruptura de la banda con la discográfica Warner, poseedora de su catálogo completo, y su estreno con Interscope para un álbum que ha sido producido por John Shanks y Ross Hogarth y que ha vertido ríos de tinta en los momentos previos a su definitiva salida, sea por el mero hecho de lo que representa, sea porque no anda exento de controversia.

¿“A Different Kind Of Truth” es lo que puede ofrecer realmente VAN HALEN en 2012 a nivel de creatividad? Más bien, no. Contrastado queda en boca de sus protagonistas que este material es rescatado de maquetas inéditas escritas en los años de mayor creatividad y éxito de la banda, en algunos casos, siendo retocados y modificados sus textos o su partitura. Por ello, se podría decir que no es un nuevo disco al cien por cien. El ex-vocalista Sammy Haggar, uno de los mayores detractores de esta obra, confirmaba que estos temas ya los conocía y que pertenecían a la época anterior a su entrada al grupo. No dudó en tildarlo de “Zero inspiration”, afirmación que recoge una doble intención e interpretación a cual más acertada; la primera apunta a que “Van Halen Zero” es el nombre con el que circula en el mundillo de los bootlegs la célebre demo que la banda grabó en 1976 para Warner Bros, y la segunda se ajusta a su traducción literal. Recién puesto en las tiendas, David Lee Roth confirmaba que los temas de este disco se gestaron entre 1975 y 1977, algo que, con mayor o menor puntería, era del dominio de todo fans que se precie de VAN HALEN.

Aparte de todo esto, el diseño de portada tampoco esquiva la polémica. La locomotora de la cubierta también ha hecho bastante ruido al evidenciar un asombroso parecido con la del álbum “Movin´ On” de COMMODORES. Para unos será un plagio, para otros un homenaje, para otros una forma de llamar la atención granjeándose publicidad extra.

Centrándonos ya en el contenido, el álbum arranca con “Tattoo”, el tema que ha recibido los honores de ser el single. Posiblemente sea uno de los más flojos del total. De aires desenfadados, es el que suena más popero y quizá el que vaya en mayor consonancia con el legado de Roth en solitario. También tiene un sonido más contemporáneo. Es probable que por esto se haya elegido como primer sencillo, por mucho que esté inspirado en “Down In Flames”, canción que se quedó fuera del segundo disco de la banda, no así de sus directos. A la larga, “Tattoo” va a ser el tema que más desentone con el resto.

El susto inicial acaba cuando nos topamos con “She's The Woman”. Ahora más que nunca, esto es puro VAN HALEN. Sí, es el tema de “Van Halen Zero” con alguna modificación, pero que no deja de presentar a la banda en plena forma facturando ese hard rock tan característico. “You and Your Blues” es uno de los pocos que me los imagino casi mejor con Haggar, muy pegadizo y melódico. Con “China Town” se dispara el velocímetro, sus ritmos frenéticos de guitarra y batería se enclaustran en una composición afín a las que elucubraba la banda en sus primeros años.

“Blood and Fire” tiene visos a ser el segundo single, aunque ya se verá. Es un tema más accesible y comercial que se edifica sobre un riff del tema instrumental “Ripley”, que Eddie compusiera para la banda sonora del film “The Wild Life” (Cameron Crowe, 1984), de la cual se hizo cargo. Los decibelios suben considerablemente con “Bullethead”. Su sonido retrotrae de inmediato al primer disco de la banda, incluso hay efectos de guitarra similares a los de “Running With The Devil” u “On Fire”. Otro de los temas más desbocados es “As Is”, cuya especie de introducción vale de preludio para un nuevo ejercicio de hard potente y veloz. “Honeybabysweetiedoll”, suena más moderno y experimental, siendo otro de los cortes más extraños por su singularidad, ya que la tónica predominante es la de ese hard rock fuerte y directo que desplegaron en sus inicios.

También se pueden encontrar temas con toques funk como “The Trouble With Never”, donde el estribillo lo coronan esos típicos coros. En esa parcela logran que no echemos de menos a Mark Anthony, ya que su ejecución va indisolublemente unida a la marca VAN HALEN. “Outta Space” es la reconversión de “Let´s Get Rockin´”, otro de la primera maqueta. Aquí cambian letras y coro, mientras que la música permanece mayormente fiel a la original. “Stay Frosty” tiene claras reminiscencias de “Ice Cream Man”, sobre todo en su primer tramo acústico.

Los dos últimos cortes tienen su procedencia bien esclarecida. Ambos se extraen de la célebre demo para Warner Bros. “Big River”, que a juzgar por su sonido cabría perfectamente en su primer disco, no es otra cosa que “Big Trouble” (no confundir con la canción de DAVID LEE ROTH en solitario) con distinta letra. Y “Beats Workin´”, que mantiene ese sonido clásico, es la mutación de “Put Out The Lights”, también con un nuevo texto y diferentes arreglos.

Definitivamente, el sonido clásico que la banda desplegó a finales de los setenta y principios de los ochenta queda patente aquí, pese a que la forma de lograrlo haya sido la que ha sido. Y juzgándolo en base a la calidad de sus canciones, estamos ante un gran disco, por mucho que sean sobras, desechos de otros discos o refritos.

Y otra cosa: si este álbum triunfa, que seguramente, no sería de extrañar que encontráramos más productos de este jaez, fabricados con material desempolvado que no ha visto la luz. Eddie Van Halen manifestó en su día que guardaba música “como para hacer diez discos”. Son muchas las bandas clásicas que presumen de tener montones de canciones en el baúl. Ahora no vaya a ser que nos vengan con recopilatorios de temas inéditos caso “A Different Kind Of Truth”.

Discográfica: Interscope.
Puntuación: 8,2/10.

Listado de temas:

1. Tattoo
2. She's The Woman
3. You and Your Blues
4. China Town
5. Blood and Fire
6. Bullethead
7. As Is
8. Honeybabysweetiedoll
9. The Trouble With Never
10. Outta Space
11. Stay Frosty
12. Big River
13. Beats Workin'


2 comentarios:

  1. Acertada la elección de temas antiguos para la "vuelta" de Van Halen. Han jugado a caballo ganador, suena a 1978-1984. Hubiera estado bien que algunos de estos cortes estuvieran plasmados en las caras B de los singles de la época. En definitiva no han arriesgado mucho, con esto y los clásicos del periodo David Lee Roth la asistencia a sus conciertos está asegurada. Mis favoritos: "Chinatown" y "Blood & Fire".

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  2. Por cierto la carátula malísima, como la mayoría del grupo, a excepción de "Balance" (1995)...Y encima "copiada". Sammy Hagar normal que este molesto, Chickenfoot es efímero.

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